El
cerebro es el gran misterio pendiente para la ciencia. Iniciativas como el
Human Brain Project tratan de resolver las piezas de este puzzle, que nos
permite contar con un potente “supercomputador” sobre los hombros. Pero cuando
este tipo de investigaciones aún no han dado sus frutos, científicos de la Universitat Pompeu Fabra han conseguido
desarrollar el primer robot basado en el cerebro completo de un ratón.
Se llama DAC-X,
y ha sido construido por investigadores del Grupo de Sistemas Sintéticos,
Perceptivos, Emotivos y Cognitivos de la UPF. Los científicos han ido un paso
más allá de la clásica modelización de un cerebro, puesto que el robot es
capaz de controlar su comportamiento en tiempo real.
Esta
modulación de la conducta robótica se asemeja mucho a lo que sucede en un ser
vivo. Su logro ha sido posible gracias a una investigación completamente
multidisciplinar, que combina neurociencia y psicología con inteligencia
artificial y robótica.
Así han
obtenido los frutos tras más de dos décadas trabajando en la conocida como
teoría del Control Adaptativo Distribuido de la mente y el cerebro.
Esta
teoría propone que los animales en el mundo real se ocupan de tareas vitales,
como por ejemplo la obtención de alimentos, satisfaciendo cinco grandes
objetivos, que a su vez responden a cuestiones del tipo “cómo”, “por qué”,
“qué”, “dónde” y “cuándo”. Es un planteamiento al que Paul Verschure ha llamado
“el problema H4W”.
En otras
palabras, esta conducta se basa en entender dónde y cuándo hay que ir a por los
recursos, qué deben buscar los alimentos y cómo, la manera de evitar los
obstáculos y la forma en la que volver a la base. Verschure y sus colaboradores
tratan, por tanto, de entender cómo el cerebro y los circuitos neuronales
controlan estos comportamientos complejos y su propia coordinación.
El robot
diseñado, DAC-X, nos ayuda a entender la propia coordinación de las áreas
cerebrales. Al construir el dispositivo, los científicos han podido juntar
todas las “piezas” y verlas en acción en un sistema fruto de la robótica. Según
señalan desde la UPF, el modelo DAC-X es único a nivel biológico, pero
también presenta una innovadora capacidad de controlar el robot, “facilitando
con ello la comprensión de las dinámicas realistas del cerebro en el mundo
real”.
Es decir,
DAC-X puede ayudarnos a entender cómo funciona el cerebro a través de la
robótica. De este modo, el primer robot basado en el cerebro completo de un
ratón puede permitirnos avanzar en el estudio de la mente, además de darnos
pistas sobre cómo se producen las enfermedades, mejorar el diagnóstico o las
intervenciones clínicas en medicina.
*Con información de americaeconomia.com)
*Crédito
imágenes: Universitat Pompeu Fabra
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