La
inversión en obras privadas se encuentra prácticamente detenida ante la falta
de certidumbre por la pandemia, reconoció el presidente de la Cámara Mexicana
de la Industria de la Construcción (CMIC) en Puebla, Héctor Sánchez Morales.
Destacó
en entrevista que el arranque de año para esta industria es complicado debido a
las restricciones que impone la pandemia para trabajar con aforos reducidos al
30 por ciento, además que hay poco circulante económico.
Comentó
que hay empresas constructoras que han logrado trabajar en proyectos de obra
pública, con mantenimiento a carreteras, conservación de infraestructura
hospitalaria o educativa, sin embargo, en la parte de privada la inversión está
detenida a excepción del desarrollo de vivienda.
“No
tenemos una claridad en el tema de inversión en obra privada. La misma suerte
que estamos corriendo en la industria de la construcción, seguramente
inversiones de otras industrias están detenidas, no tenemos un dato preciso
para cuándo pudiera reactivarse”.
Reconoció que el hecho de trabajar con aforo reducido al 30 por ciento, según el decreto estatal,
complica el desarrollo de obra y con ello hay una menor plantilla de
trabajadores.
“Hemos tenido que mandar a descansar a gente que
no se está empleando ahorita, y las empresas en ese ciclo de 30 por ciento
tampoco van trabajando con la velocidad que se requiere para poder cobrar los
avances”.
La
industria de la construcción en Puebla cerró el mes de enero con 40 mil 095
puestos de trabajo afiliados al seguro social, es decir, 7 mil 047 menos a los
que había en igual mes de 2019.
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