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Alejandro Díaz de León, el gobernador de la autoridad monetaria, aseguró que hay riesgo de una desaceleración económica del país más pronunciada, luego de la decisión del Banco de México (Banxico) de bajar en 25 puntos base su tasa de referencia.
Las tensiones comerciales globales han derivado en impactos económicos en distintos países, lo que ha llevado a alertar a los inversionistas de una recesión económica mundial, apuntó Díaz de León en entrevista con Radio Fórmula.
Dijo que a los riesgos de una desaceleración más pronunciada “se han incrementado, y para finales de agosto Banxico revisará su pronóstico de crecimiento económico para éste y el próximo año, así como su proyección de inflación.
“Estamos en una situación compleja. En dos semanas estaremos revisando nuestro pronóstico de crecimiento para este año y el siguiente, y también nuestro pronóstico de inflación en el informe trimestral, y ahí estaremos dando ya una visión más precisa de lo que esperamos para este año”, dijo el gobernador del Banxico.
Aseguró que los focos en el tablero están indicando que el sesgo es a la baja en cuanto a las perspectivas de crecimiento económico.
Así que, los riesgos de una recesión mundial están presentes, por lo que es necesario crear condiciones internas que generen confianza de los inversionistas para contrarrestar los choques externos.
“Hay muchos elementos estructurales que pueden revertir, generar confianza y cambiar la dinámica interna y transitan por esta agenda de seguridad, de promover la inversión, de la apertura en sectores, de infraestructura, en fin son muchos”, dijo.
Por último, calificó de “inédito” el entorno externo actual, pues no se había tenido esta combinación donde las tensiones comerciales han dado lugar a una caída en la producción manufacturera, en la inversión prácticamente en todo el mundo.
Efectos de la baja de interés
Banco
de México recortó este jueves la tasa de interés 25 puntos, en tendencia con
Estados Unidos, Nueva Zelanda, Brasil, que aplicaron una medida similar hace
unos días.
Así, el
el referencial en México quedó en 8.0 por ciento.
El
banco central argumentó que la decisión se toma a partir de que continúa el
estancamiento de la actividad económica en México, como reflejo de una mayor
debilidad en la mayoría de los componentes de la demanda agregada.
Se
espera que al bajar la tasa de referencia se impulse el crecimiento de la
economía de México, mediante el financiamiento al consumo, ya que podrían bajar
las tasas de interés que cobran los bancos a través de las tarjetas de crédito,
así las personas pueden adquirir casas, autos o diversos bienes como
electrodomésticos, electrónicos, entre otros artículos, a un menor costo.
Para las
finanzas de México la baja en la tasa de interés podría no ser positiva para la
deuda del país, ya que ofrecerá un menor rendimiento para los inversionistas
extranjeros.
Sin
embargo, la tasa de interés en México aún es de las más altas en el mundo, si
se toma en cuenta que está en 8.0 por ciento.
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