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El
consumo interno en México “da muestras de agotamiento”, ya que el elevado costo
del dólar y el aumento en las tasas de interés acentúan la incertidumbre de la
población sobre el comportamiento económico en el corto plazo.
Marcos
Gutiérrez Barrón, catedrático investigador de la Facultad de Economía de la Upaep,
dijo que basta ver el reporte de enero de la Asociación Nacional de Tiendas de
Autoservicio y Departamentales de México (ANTAD) en el que se refleja una caída
de 0.59 por ciento en las ventas.
A lo
anterior se suma una contracción en el manejo de crédito al consumo vía
tarjeta, pero también en otros financiamientos ya sea hipotecario o para autos,
por ejemplo.
El
costo del dinero se ha elevado, ya que la tasa de interés aplicada por Banxico
es de 6.25 por ciento, que en su momento repercutieron las instituciones bancarias
en los diferentes instrumentos, y eso limita el poder adquisitivo de las personas.
Pero
también está el temor de lo que pueda ocurrir en el corto plazo, al ver la
constante depreciación del peso frente al dólar, y las implicaciones que pueda
tener la renegociación del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
Con
respecto al estado de Puebla, Gutiérrez Barrón aseguró que las condiciones son más complicadas que el panorama nacional,
dado que el crecimiento económico de 2016 fue de apenas 1.1 por ciento.
Además,
el estado acusa una pobreza laboral del 50.3 por ciento, al tiempo que la
informalidad creció casi el 68 por ciento, incluso el año pasado apenas se
crearon 29 mil nuevos empleos, cifra muy baja dadas la necesidad de 60 mil
plazas anuales.
Todo lo
anterior limita el consumo de los poblanos, su poder adquisitivo se deteriora
junto a la precaución que tiene las personas por lo que pueda ocurrir en el
corto plazo, concluyó el académico.
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