El paro técnico de cuatro semanas que aplica la planta alemana Volkswagen en las líneas de producción del Beetle y del Jetta, no pone en riesgo el empleo y estabilidad salarial de trabajadores en empresas proveedoras de autopartes, sostuvo el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Horacio Peredo Elguero.
En entrevista, expuso que la suspensión de actividades en la planta automotriz obedece al próximo arranque de producción del modelo Tiguan, y estaba programada desde inicios del año, por tanto, en este periodo se da oportunidad a los proveedores de ajustar sus procesos y realizar maniobras de mantenimiento.
Agregó que prácticamente las 65 empresas proveedoras afiliadas a la Canacintra no tienen como único cliente a Volkswagen, toda vez que también suministran insumos a otras plantas automotrices en el país, con lo que compensan su producción.
“Afortunadamente todos los paros técnicos han sido programados, esto da oportunidad a las proveedoras de ajustar procesos y crear condiciones para que en momentos de producción las líneas no se paren y garantizar siempre la entrega de autopartes de las diferentes unidades que produce Volkswagen, mientras todo esté planeado no hay problema”.
El dirigente del sector industrial en el estado, sostuvo que durante el periodo de paro técnico en la planta automotriz, la mayor parte de las proveedoras afiliadas al organismo optan por otorgar vacaciones a sus trabajadores sin afectar su salario, y otras pactan acuerdos con sus sindicatos para aplicar otros esquemas.
“Normalmente las empresas proveedoras no ponen condiciones de 50 por ciento (en salario) porque estén en paro técnico, porque salen de vacaciones aprovechan esta condición y no hay necesidad de mandarlos a medio salario. Incluso algunos aprovechan a dar servicio a otras líneas de producción porque Volkswagen no es único cliente”.
Precisó que la Canacintra afilia a 65 empresas del sector automotriz y autopartes en el estado, con siete mil 200 trabajadores, de las cuales dijo, solo un 3 por ciento resultan afectadas con el paro en la producción.
La postura del dirigente contrasta con lo dicho por la Confederación Sindical Republicana (CSR), que reconoció que aplicar los paros técnicos representa pagar el 50 por ciento de los salarios a los obreros, incluso, los propios sindicalizados de la automotriz verán su ingreso recortado a la mitad con la suspensión de Beetle y Jetta.
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