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2/5/2018
Socorro López Espinosa
Granjas Carroll canceló la inversión de 165 millones de dólares por la presencia de líderes que obstaculizaron dos proyectos, que beneficiarían a cinco mil productores y generarían más de dos mil empleos en las zonas de Libres y San Juan Atenco, Puebla.
El director de relaciones públicas de Granjas Carroll de México (GCM), Tito Tablada Cortés, aseguró que la presencia de “solo seis líderes” influyó negativamente en la zona, pues se oponen a que la empresa porcícola lleve a cabo la operación de un rastro tipo TIF, a menos que pague el “derecho de paso” por la instalación del gasnatural, la construcción de una planta de alimentos y de una granja.
Desde 2014 a la fecha la empresa porcícola ha dejado de invertir un total de 165 millones de dólares y no se generaron 650 empleos directos, 2 mil indirectos y no se beneficiaron a 5 mil productores que habrían recibido más de 1,260 millones de pesos por vender 300 mil toneladas anuales de granos.
“De la fecha en que iniciamos la expansión al día de hoy hemos tenido que cancelar dos proyectos, uno en Libres donde se construiría una granja de cinco mil vientres y otro en San Juan Atenco, donde se pretendía instalar una planta para producir 400 mil toneladas de alimento balanceado, las cancelaciones básicamente por la oposición de algunos líderes”, dijo.
Al no haber construido la planta de alimentos en San Juan Atenco, impidió aprovechar el potencial granelero del Valle de Serdán y la región, pues la empresa porcícola tenía la intención de comprar a los campesinos un promedio de 300 mil toneladas de granos al año, entre maíz, trigo y cebada, con una derrama anual aproximada de 1 mil 260 millones de pesos que se repartirían entre más de 5 mil productores y sus familias.
Tan solo la planta de alimentos iba a traer 25 mil vientres a la zona, o sea que GCM habría instalado 5 granjas y no solo una, lo que impidió una inversión complementaria de 100 millones de dólares y 400 empleos directos más.
“Eso es lo más triste, porque habiendo posibilidades de hacer contratos de agricultura de largo plazo bien pagados y directamente con productores organizados, éstos siguen sueltos y en manos de algunos intermediarios que castigan sus precios y no permiten el desarrollo de la región”, abundó Tablada Cortés.
Asimismo, lamentó que no pueden avanzar en los trabajos del rastro que iniciaría su operación en este año, pues un grupo de seis personas pretenden cobrar “derecho de paso” para hacer la instalación del gas natural que abastecería el rastro.
“Es increíble que seis personas detengan la posibilidad de empleo directo para 1 mil 150 personas, principalmente mujeres.” “Vemos un desarrollo muy promisorio para Oriental y toda esa región con la industria militar y el rastro, pero a la fecha no se están dando las condiciones”, lamentó.
Por último, donde sí avanza la inversión es en Tepeyahualco, Puebla, pues ahí se construye la segunda granja más grande de México para 10 mil vientres bajo el concepto de gestación grupal.
En Tepeyahualco, la empresa celebró el Día del Niño para los hijos de sus trabajadores y de la comunidad en general.
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