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Ella decidió disfrutar de la vida
16/12/2014
Laura, colaboradora de la empresa por más de 30 años, logró jubilarse hace 11 meses.
Mujer trabajadora, valiente con la vida, logró sacar adelante a sus 6 hijos, dando carrera universitaria a cada uno.
Recuerdo su último día de trabajo, nos reunimos todo el personal e invitamos a sus familiares para despedirla del mundo laboral con flores y unas palabras de gratitud por los años trabajados.
Aplausos y abrazos de sus compañeros y directivos de la empresa significaron un homenaje a su perseverancia y buen desempeño laboralmente hablando, lo que más se le reconoció fue como ella, siendo jefa de familia sin una pareja, les dio formación, educación y estudios a sus 6 hijos.
Al final de la ceremonia de despedida, nos habló de lo que haría de su tiempo, su respuesta fue clara y contundente:
“-Voy a hacer lo que me gusta, darme el tiempo hacia mi persona, disfrutar de la vida. ¡Mañana mismo empiezo con clases de zumba!”
A más de un colaborador le rodaron las lágrimas al escuchar a Laura a sus 60 años.
Como director de la empresa, y a nombre de todos los colaboradores, la felicité efusivamente con una frase anónima que dice:
“Lo pedí todo a fin de poder disfrutar la vida, y se me dio la vida de manera que pudiese gozar de todo.”
Laura, durante 22 años de su vida laboral en la empresa, gozó de un seguro de vida, mismo que ella pagó el 50%, y el otro 50% la empresa como una prestación adicional. Su preocupación en ese entonces era no dejar desprotegidos a sus hijos.
Cito una frase en el mismo sentido de John Lennon:
“La vida es aquello que te va sucediendo mientras estás ocupado haciendo otros planes.”
Pasó el tiempo, sus hijos hoy ya no dependen de ella, es autosuficiente en su jubilación.
Recientemente, Laura hablo a la planta con el Departamento de Recursos Humanos y pidió cancelar ese Seguro de Vida, mismo que dentro de sus bondades tenía ya un atractivo fondo de ahorro.
La compañía aseguradora al finiquito del seguro de vida de Laura, nos extendió un cheque, misma cantidad que se le dio a Laura con un cheque a su nombre de nuestra compañía.
Al recibir el cheque le pregunte a Laura:
¿Qué vas a hacer con este dinero?
Y me respondió: “Seguir disfrutando de la vida, y con este dinero voy a poner mi propio negocio para dar clases de zumba a adultos en plenitud”.
Mi querido lector, esto lo llamo lección de vida.
“La vida no se mide por las veces que respiras, sino por aquellos momentos que te dejan sin aliento”. (Hitch)
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