13/12/2022
Cuando
inicias un proyecto empresarial como emprendedor o socio fundador, la prioridad
importante es vender constantemente y sistémicamente cada mes, cada semestre,
cada año es incrementar las ventas con nuevos productos, con nuevos vendedores
para abarcar más mercado.
Con el
paso del tiempo en la misma dirección de incrementar las ventas se requiere de
una plantilla laboral, con apoyo de gerentes de área para poder delegar. Nada
sencillo es encontrar a tu segundo, a tu gerente a quien le vas a confiar parte
de la operación incluyendo la parte administrativa.
Para
encontrar a esta persona, las primeras interrogantes que surgen son:
· ¿Cómo
le voy a dar las llaves para que cierre o abra el establecimiento?
· Que dé acceso al personal, en el mismo sentido asignar las tareas para el día,
semana o mes.
Y en
aspectos financieros es todavía con más incertidumbre y al inicio,
estableciendo una caja chica, si así se le denomina a cierta cantidad de dinero
en efectivo para los gastos de operación que vayan surgiendo. Más aún, cuando
llega el momento de soltar la chequera, el token, si tienes banca en línea para
realizar pagos a proveedores, pagos de salarios, etc.
Algunos
empresarios llevan este proceso de delegar a quien empezó el proyecto, la
mayoría de las decisiones se toman a prueba y error, me refiero a que para
encontrar un buen gerente no es a la primera, ni segunda, puede ser x número de
contrataciones hasta que te sientas bien, con confianza.
Este
gerente tiene que hacer que su equipo de colaboradores soporte el ritmo de
crecimiento, a esto se denomina: “Hacer
tu equipo”
Pasamos
algunos años para que el director comercial recopile las buenas prácticas,
elimine lo que no aportó y se decida a profesionalizar la empresa, en otras palabras,
que documente los procesos, asigne y evalúe las tareas, en el mismo sentido, ir
disminuyendo riesgos, todo esto con un marco de estandarización con la idea
firme de que saldrá bien y a la primera, para llegar a la institucionalidad.
Finalmente, llega el momento de buscar la sucesión para que aquel proyecto empresarial que
empezó con demasiados altibajos (incluso sin la confianza de familiares
directos) y hoy es una empresa que genera riqueza compartida.
En resumen,
las responsabilidades de un director general son:
· Crecer
(no solamente en ventas).
· Conformar
un equipo humano.
· Profesionalización.
· Institucionalización.
· Generación
de riqueza.
· Establecer
la sucesión.
¿Tú has seguido estos pasos?
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